Protocolo Ribe Clinic de escleroterapia en el tratamiento para eliminar las varices de las piernas
El médico especialista realiza una historia clínica con exploración física para valorar la existencia de varices en las piernas y el grado de las mismas para decidir el tratamiento más indicado para eliminar las varices.
Si el paciente es candidato para la técnica de escleroterapia para quitar sus varices, se realizan fotos y se decide la zona a tratar con varices en la que se inyectará la microespuma. Es una técnica que apenas produce molestias al paciente, no requiere hospitalización ni anestesia, por lo que puede emplearse en pacientes mayores, a los que no se puede operar.
Tras la sesión de escleroterapia para eliminar las varices de las piernas se produce una pequeña inflamación en la zona tratada, que desaparece paulatinamente a las pocas horas. Dependiendo del tamaño de la variz y por tanto de la cantidad de sangre que ésta contiene, puede quedar una zona “violácea” que será después marrón y puede durar unas semanas hasta que la sangre y la hemosiderina (contenido de hierro de la sangre) se reabsorbe.
Tras este tratamiento para quitar las varices se puede hacer vida normal. En algunos casos, se pone compresión en la zona tratada. No es necesario hacer reposo ni causar baja laboral.
Dado que no presenta ningún tipo de contraindicaciones (salvo la alergia al polidocanol) se puede realizar a cualquier edad y sin importar las patologías asociadas del paciente.
Es recomendable (no contraindicado) no exponerse al sol después del tratamiento de escleroterapia para quitar las varices ya que la hemosiderina es muy fotosensible y podría pigmentarse. Pero con fotoprotección solar alta se puede ir al sol.